El término “microflora” o “microbiota” intestinal hace referencia al ecosistema microbiano que coloniza el tracto gastrointestinal. Cuando un bebé se encuentra dentro del vientre materno, su cuerpo es completamente estéril, lo que significa que no hay microorganismos ni bacterias en él, después del nacimiento, durante el parto y en los primeros días de vida, las bacterias se asientan en el intestino y se desarrolla la flora intestinal; existen más de 500 especies de microorganismos que conviven en armonía con nuestro organismo, pues el intestino humano proporciona sustratos y condiciones ideales para su desarrollo; sin embargo, la flora intestinal es sensible a ciertas situaciones y condiciones, por lo que estas bacterias cambian a lo largo de nuestra vida. (1, 3)
La población microbiana del intestino humano incluye unos 100 billones de bacterias. En los adultos por ejemplo, varía mucho dependiendo de varios factores, entre ellos la dieta, la genética, nuestro entorno, el estrés, los medicamentos diarios y ocasionales como los antibióticos (que lo reducen), la edad e incluso el clima. (3)
Las tareas principales de la flora intestinal son limitar el crecimiento de microorganismos dañinos para los humanos, sintetizar ciertas vitaminas y otras sustancias útiles que promueven la absorción de nutrientes, promover la digestión de ciertos nutrientes y ayudar a mantener tu colon y su metabolismo intestinal saludables. (3)
Un estudio reciente demostró que durante la etapa de desarrollo del microbiota, los bebés alimentados con leche materna presentaban niveles más altos de Bifidobacterium. Estas bacterias, las primeras en colonizar el intestino del recién nacido, poseen propiedades probióticas que junto con una alimentación saludable después de los 6 meses diversifica las colonias adquiriendo un mayor número de bacterias del filum Firmicutes, características del microbiota de un adulto. (1)
Una flora intestinal estable y equilibrada asegura una buena salud, por lo que, para cuidarla, es importante consumir probióticos y prebióticos.
La principal diferencia entre los probióticos y prebióticos es la siguiente:
- Probióticos: son bacterias o colonias bacterianas (medidas en unidades formadoras de colonias) que apoyan el proceso digestivo, como los ácidos estomacales, y entran vivas al intestino, donde se asientan, crecen y se reproducen, produciendo efectos benéficos en el ser humano. Los probióticos más conocidos son:
• Lactobacillus acidophilus
• Lactobacillus casei var. Shirota
• Lactobacillus fermentum
• Lactobacillus casei
• Lactobacillus crispatus
Las fuentes más comunes de los prebióticos naturales son los lácteos fermentados como el kéfir, el yogurt, las verduras fermentadas como el kimchi y el chucrut y bebidas como la kombucha. (2)
- Prebióticos: son sustancias no vivas, como los FOS (fructooligosacáridos), que estimulan el crecimiento de bacterias beneficiosas. Es primordial que tanto los niños como los adultos consuman alimentos ricos en fibra prebiótica como la fibra que proviene de vegetales y cereales ricos en carbohidratos no absorbibles, como los integrales, y otros suplementos ricos en inulina como la inulina de agave, la achicoria, alcachofa y la cebolla para mantener una microbiota intestinal sana.
Si estás considerando tomar suplementos, consulta con el médico para asegurarte de que sean adecuados para ti.
- Stewart, C.J., Ajami, N.J., O’Brien, J.L. et al. Temporal development of the gut microbiome in early childhood from the TEDDY study. Nature 562, 583–588 (2018). https://doi.org/10.1038/s41586-018-0617-x
- Dynan, N., 2018. What are probiotic supplements – and are they necessary?. [online] NewsGP. Available at: https://www1.racgp.org.au/newsgp/clinical/what-are-probiotic-supplements-%E2%80%93-and-are-they-nece [Accessed 21 September 2021].
- Guarner, F.. (2007). Papel de la flora intestinal en la salud y en la enfermedad. Nutrición Hospitalaria, 22(Supl. 2), 14-19. Recuperado en 04 de octubre de 2022, de http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0212-16112007000500003&lng=es&tlng=es.